25 de junio de 2007

Bailanta

Recuerdo que hace unos años bailabas al ritmo de "El Hijo de Cuca" "Qué tendrá el petiso" "La pollera amarilla" "Violeta" y te sabías las letras.

Con tus amigos seguías a algunos de los bailanteros (sobre todo a Alcides, es que claro, cómo no, el único de toda la monada que tiene ojos celestes) y te hacías el divertido y con eso lavabas tus culpas de clase media.

Como la cumbia se bailaba en Punta del Este, fuiste el primero en anotarte, así viste, todos creían que vos también tenías plata pero te divertías con "la música del gronchaje".

Y ahora? Admitirías que te gustaba la bailanta?

2 comentarios:

MM dijo...

Me encanta la bailanta.

Cuando murió Gilda, casi lloro. Fui al santuario varias veces.

Fui al último recital del Potro Rodrigo en La Plata. Cuando me desperté al mediodía había muerto.

A Alcides lo conocí personalmente en la Gobernación de Buenos Aires cuando a algún genio se le ocurrió hacer campaña con Violeta en 1988, a favor de la reforma de la Constitución de Cafiero.

A Gladys, la Bomba Tucumana le dí un beso y me saqué una foto enh un acto de campaña en el 1995.

Era habitué de Escándalo Bailable cuando iban sólo los negros y me discriminaban por blanco.

Lo chic, verdaderamente chic, es contar cosas como éstas.

Lo grasa, verdaderamente grasa, es ponerse la corbata como vincha en un cumpleaños de quince o en un casamiento y cantar como uh boludo "haceme un peteeee! Pe pe pe pe!!.

PD: Extraño la bailanta. Casi no había drogas, a los borrachos los sacaban y había gente humilde con ganas de pasarla bien, no pibitos chorros que le bolsiquean.

OK malita????

Ariana Aaron dijo...

OK, Don Groncho, parece que sin conocerlo es la fuente de mi inspiración!